Tailandia y Camboya han acordado que Malasia actúe como mediador en su conflicto fronterizo en curso, especialmente en la zona disputada del Triángulo Esmeralda. Se han programado conversaciones de alto nivel, con la participación de Malasia con el objetivo de reducir las tensiones y encontrar una solución pacífica. El conflicto ha generado preocupaciones sobre la seguridad de los atletas y funcionarios antes de los próximos Juegos del Sudeste Asiático, pero los organizadores aseguran que los preparativos siguen en marcha. Las autoridades malasias también están monitoreando de cerca la situación para proteger las inversiones nacionales e intereses comerciales en ambos países. El paso hacia la mediación refleja los esfuerzos regionales para mantener la estabilidad y la cooperación en medio de las crecientes tensiones.
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