Una grave crisis de hambre está afectando a Gaza, con la ONU y agencias de ayuda advirtiendo sobre una posible hambruna masiva y un aumento rápido en el número de muertes, especialmente entre los niños. Informes describen a las personas como 'cadáveres ambulantes', con uno de cada cinco niños desnutridos y hospitales abrumados por casos de inanición y desnutrición. A pesar de que miles de camiones de ayuda esperan en la frontera o dentro de Gaza, la distribución está estancada debido a acusaciones entre Israel y la ONU sobre la responsabilidad del bloqueo y los fallos en la entrega de ayuda. Periodistas y trabajadores de ayuda también están sufriendo de hambre, y la condena internacional está aumentando a medida que la situación humanitaria empeora. Los llamados a un alto el fuego inmediato y acceso sin restricciones a la ayuda están creciendo, pero el estancamiento político persiste a medida que la crisis se agrava.
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