Los pueblos de todo el oeste de Carolina del Norte, incluido Swannanoa, fueron transformados de la noche a la mañana por la enorme tormenta. Las aguas fangosas de las inundaciones levantaron casas de sus cimientos. Deslizamientos de tierra y ríos desbordados cortaron la única vía de entrada y salida de las pequeñas comunidades de montaña. Los rescatistas dijeron que estaban luchando para responder a la gran cantidad de llamadas de emergencia. Familiares ansiosos recurrieron a Facebook para buscar a sus seres queridos de los que no habían tenido noticias.
"Esto parece ser el propio huracán Katrina del condado de Buncombe", dijo Avril Pinder, la gerente del condado, que incluye Asheville.
El número de muertos aumentó en todo el sureste a medida que se hizo más claro el alcance de la devastación de Helene. Al menos 49 personas habían muerto en cinco estados: Florida, Georgia, Carolina del Norte, Carolina del Sur y Virginia. Según los primeros recuentos, Carolina del Sur sufrió la mayor pérdida de vidas, con al menos 19 muertes. Georgia ha reportado 11 muertes; Florida, 11; Carolina del Norte, 7; y Virginia, 1.
Es probable que el número de muertos por la tormenta aumente. Taylor Jones, director de gestión de emergencias del condado de Buncombe, dijo que hubo múltiples fatalidades allí, aunque se negó a proporcionar cifras exactas. Dijo que los funcionarios estaban recurriendo a su "plan de fatalidades masivas" e intentando notificar a los familiares, un proceso complicado por las interrupciones del servicio.
Los funcionarios pidieron a cualquier persona que esté buscando a amigos o familiares que completen un formulario que los líderes del condado utilizarán para intentar localizar a los desaparecidos. En Asheville, las autoridades dijeron que había 60 personas desaparecidas.
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